BERENJENA
Solanum melongena
Originaria del sudeste asiático, la berenjena es una herbácea erecta de 70 a 150 cm. Forma parte de las solanáceas, al igual que el tomate y el pimiento. El fruto es de piel lisa y brillante, con diferentes formas, tamaños y colores, según la variedad, aunque predominan las ovaladas de tonos morados con peso entre 100 y 500 gramos. La pulpa es consistente, firme, de textura esponjosa y con pequeñas semillas.
Cultivo y manejo
Se reproduce por semillas que germinan de 10 a 15 días después de plantadas. El momento óptimo de siembra es de octubre a enero, pero con un manejo adecuado puede cosecharse prácticamente durante todo el año. Requiere suelos fértiles y con buen drenaje.
Propiedades
Contiene potasio, fósforo, calcio, magnesio, hierro y vitaminas A, B y C. Los frutos regulan los niveles de colesterol en sangre y la presión arterial. Además, son un excelente diurético si se consumen como agua común (un fruto mediano hervido en un litro de agua). Sin embargo, las hojas son tóxicas y solo deben utilizarse externamente como cataplasma para tratar quemaduras, abscesos y dolores reumáticos.
Usos culinarios
Por su delicado sabor, la berenjena es un producto sumamente versátil y muy apreciado en las cocinas de todo el mundo. No debe consumirse cruda, sino a la parrilla, guisada, al horno, frita, al vapor, rebozada, encurtida… En refrigeración la berenjena puede conservarse poco más de 10 días, pero debe desecharse si la piel está arrugada y la consistencia es muy suave.
- Caviar de berenjena
2 berenjenas medianas
4 cucharadas de aceite
2 cucharadas de zumo de limón
2 dientes de ajo majados
1 cebolla pequeña trinchada
3 cucharadas de perejil, cilantro o albahaca
Sal y pimienta al gusto
Lavar las berenjenas y cortarlas por la mitad a lo largo. Bañar las superficies cortadas con un poco de aceite, sal y pimienta. Cocer al vapor o en el horno hasta que estén muy suaves. Dejar enfriar y raspar la pulpa de las cuatro mitades. Mezclarla en un recipiente con los restantes ingredientes. Revolver hasta lograr la consistencia de un puré que se acompaña de rebanadas de pan.
- Berenjena rebozada
Pelar la berenjena y cortarla en ruedas y luego en bastoncitos. Sumergirlos media hora en agua con sal para retirarles el amargor. Escurrirlos y pasarlos por una mezcla fluida de harina de trigo, sal, pimienta, agua gaseada o cerveza y clara de huevo antes de freírlos en grasa bien caliente. A la pasta del rebozado también se le puede añadir ajonjolí, cebolla, perejil, mejorana…